lunes, 1 de septiembre de 2008

LA GUERRA DE LOS ROCES

River Plate 0 - 0 San Lorenzo
Apertura - 4ª fecha
Estadio Monumental


RIVER PLATE: Ojeda (6); Ponzio (5), Tuzzio (5) y Villagra (5); Ferrari (4), Barrado (4), Ahumada (5) y Abelairas (5); Buonanotte (4), Salcedo (4) y García (6). Luego Ríos, Rosales y Fernández. DT: Diego Simeone.
SAN LORENZO: Orión; Aguirre, Méndez, Bianchi Arce, A. Torres; González, J.M. Torres, Ledesma y Barrientos; Romeo y Bergessio. Luego Menseguez, Voboril, Hirsig. DT: Miguel Ángel Russo.
GOLES: No hubo
ARBITRO: Diego Abal (malo)
RESULTADO MORAL: River Plate 0 - San Lorenzo 0

No quiero ahora ahondar en calificativos que, desde que pitó Diego Abal el final del juego, arreciaron como una lluvia copiosa y repetitiva a cerca del mal juego visto en el Monumental. El cero los califica. Fue un mal partido. Muy malo. No es novedad. No fue el primero y tampoco será el último.
Tampoco nos esforzaremos en comprender la carga de malicia con la que se jugó el partido. Si bien las cuentas pendientes entre ambos equipos luego de aquella noche de Copa Libertadores son evidentes, había muchas maneras de saldarlas, tratando de evitar que padezcamos el maremoto de patadas y agarrones que los protagonistas nos encajaron sin avisarnos.
No hablaremos de Sebastián Méndez y su duelo personal con Radamel Falcao García. Había dicho en la previa que lo ocurrido era parte del pasado. Ahora sabemos que era otra declaración de cassette. Esa patada artera está filmada. Quizo lastimar. El tribunal tendrá que actuar en consecuencia ante las evidencias irrefutables.
Tratamos de ir un poco mas allá, y de sacar algo en claro dentro de la neblina espesa que envuelve al juego de River Plate en estas primeras fechas. Un esquema que navega a la deriva por la sencilla razón de no estar todavía en claro el mapa a seguir para llegar al objetivo.
Y esa carencia de brújula pasa tanto por la ausencia de una figura que organice las ideas y las ejecute, como por el acelere ,a veces innecesario, de todos sus hombres de ofensiva, que parecen tener la necesidad de comerse el plato antes de haberlo preparado.
Y todo se transforma en una bola de nervios e imprecisiones que solo logra que se desmerezcan las buenas individualidades con las que cuenta el plantel. Salcedo, Falcao, Rosales y Buonanotte a la cabeza.
El campeonato aún esta muy verde y hay tiempo de sobra para recuperarse y cambiar la cara. River ya hace cuatro partidos que ha arrancado el Torneo. Aunque los hinchas seguimos esperando su verdadero debut con la máxima brevedad posible.

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